Farándula

Las zapatillas más icónicas de Kanye West ya son las más caras de la historia

Las ya carísimas Nike de Kanye West fueron diseñadas para tan importante ocasión por el propio rapero, Mark Smith y Tiffany Beers.

Las zapatillas más icónicas de Kanye West ya son las más caras de la historia

Las míticas zapatillas personalizadas que el rapero Kanye West lució durante la ceremonia de los premios Grammy del año 2008, el primero de los pares de la línea Air Yeezy que el músico diseñó en colaboración con la firma Nike, han batido todos los récords registrados hasta ahora sobre el valor económico que pueden alcanzar unos accesorios de estas características en subastas privadas.

Durante un acto celebrado esta semana en la renombrada casa Sotheby’s, tan llamativo calzado vio su precio elevado hasta los 1.8 millones de dólares gracias a las pujas de una firma de inversión llamada RARES, que precisamente se dedica a la adquisición de estos complementos -aquellos que tengan importancia histórica, claro está- a fin de sacarles posteriormente todo el rendimiento económico posible.

Los casi dos millones de dólares en que se ha cifrado el valor de estas icónicas Air Yeezy superan ampliamente los 560.000 dólares que se pagaron, el año pasado y en la misma Sotheby’s, por las zapatillas del ya destronado rey de este particular nicho de mercado, el exjugador de baloncesto Michael Jordan. Sus míticas Nike Air Jordan 1, las que abrieron la veda de esa revolución en el calzado deportivo que se produjo en la década de los noventa y a raíz de la fama planetaria del entonces jugador de los Chicago Bulls, ostentaban hasta ahora este particular récord mundial.

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Las ya carísimas Nike de Kanye West fueron diseñadas para tan importante ocasión por el propio rapero, Mark Smith y Tiffany Beers -esta última, diseñadora de la multinacional- en la llamada ‘Cocina de la Innovación’ de Oregón. Varios años más tarde, en 2015, el músico se animó finalmente a comercializar su propia marca Yeezy y, a raíz de su notable éxito, el músico puede presumir ahora de haberse convertido en todo un ‘milmillonario’.